Ingredientes más utilizados en productos anticaspa

La caspa o dermatitis seborreica es una de las afecciones dermatológicas más comunes. La gama de productos y tratamientos destinados a combatirla es tan amplia como diversa, en parte debido a los muchos compuestos que se utilizan con este propósito: el ácido salicílico, la piritiona de zinc, la fluocinolona, etcétera. Al consultar a clínicas y dermatólogo pelo en Vigo sobre el mejor anticaspa, no suele obtenerse una única respuesta.

Los champús y geles anticaspa se formulan, principalmente, con piritiona de zinc. Este compuesto ha demostrado una alta eficacia en la eliminación de la caspa y la nutrición del cuero cabelludo. Pese a su historial de éxito como agente anticaspa, este derivado del zinc ha sido «perseguido» en los últimos años por el Comité Científico de Seguridad del Consumidor (SCCS, por sus siglas en inglés), y su venta solo está permitida en productos con una concentración inferior al uno por ciento.

El sulfuro de selenio, por su parte, es otro potente revulsivo contra el problema de la caspa. Por sus cualidades antiseborreicas y antimicóticas, este activo mitiga el picor y la descamación, proporcionando un alivio sintomático de la caspa.

Respecto a los productos enriquecidos con ácido salicílico, estos se benefician del efecto purificador del extracto de la corteza de sauce negro (Salix nigra), capaz de suprimir las células muertas que favorecen el desarrollo de la dermatitis seborreica.

Más desconocidas, si cabe, es la acción anticaspa del azufre, con el que se formulan gran número de champús diseñados para combatir esta afección capilar. Este compuesto funciona como un seborregulador natural, ofreciendo asimismo poderes antimicrobianos y antifúngicos que mantiene a raya a la caspa.

El ketoconazol y la fluocinolona, por último, también son aliados contra la picazón, el enrojecimiento y otros síntomas de la caspa. Los champús y geles basados en ellos son relativamente fáciles de encontrar en supermercados y plataformas online.